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Ajustar la potencia eléctrica a las necesidades de nuestro hogar puede suponer un ahorro considerable en nuestra factura de la luz, ya que cada KW de potencia cuesta alrededor de 42 euros al año, aunque puede variar en base a la tarifa que tengamos contratada.
Optimizar la potencia es un proceso que puede generarnos muchos beneficios. Se trata de analizar y contratar un cambio de potencia en función de lo que realmente demanda nuestro hogar. Si tenemos más potencia contratada de la que realmente necesitamos, estaremos pagando más de manera innecesaria.
Por ejemplo, si tienes una empresa con una tarifa 3.0 A, es decir, superior a los 15 kW en baja tensión, solamente con optimizar 10 kW, si es posible, puedes ahorrarte alrededor de 900 euros. Eso sí, tienes que saber primero si el cambio te compensa, ya que solamente se permite un cambio de potencia al año.
¿Cómo calcular la potencia que necesito?
Por ejemplo, si la potencia que tenemos es de 15 kW, podemos colocar un medidor inteligente de potencia. Si no salta, es posible que tengamos margen para reducirlo. En el caso de que la potencia sea superior a los 15 kW, la potencia se controla a través de maxímetros ( sino tienes uno puedes solicitar un maxímetro a tu compañía) que registran las potencias cuartohorarias máximas de los tres periodos de facturación, reflejando el valor cuartohoario del mes y, en base a la relación de este valor y la potencia, calcularemos la potencia a contratar. No obstante, también puedes llamar a un electricista para que haga la medición de la potencia que necesitas en función de los aparatos que tengas y, cuando lo sepas, ponerte en contacto con la comercializadora para solicitar el cambio.
¿Cómo optimizar la potencia eléctrica contratada tú mismo?
Coge una factura y busca el desglose del maxímetro que aparece en la segunda página, donde se muestra la potencia máxima alcanzada durante ese periodo de facturación. Si, por ejemplo, tienes un pico de potencia en verano o en invierno, pero no el resto del año, puedes contratar una potencia de 15 kW, por ejemplo, pero tener en cuenta que en los meses con pico, sufrirás una penalización por exceso de potencia. Eso sí, seguramente te ahorres mucho más incluso con el coste de la penalización.
¿Cómo saber si tengo contratada la potencia justa óptima?
Si tus picos son constantes y se acercan mucho a la potencia contratada, quiere decir que ya estás optimizado. En cambio, si siempre estás por encima de la potencia contratada, significa que te están penalizando todos los meses.