ATLAS Energía, con la colaboración de otras empresas leridanas, ha impulsado la salida a bolsa de EV Motors en un proyecto pionero y también con un trasfondo social, cuyo objetivo es relanzar la marca de coches Ebro, reindustrializar la Zona Francia de Barcelona y poder recuperar y preservar los puestos de trabajo de más de 1.200 trabajadores de la antigua fábrica Nissan.
EV motors, la matriz de la marca automovilística Ebro y socia del fabricante chino Cher, se estrenó el lunes como cotizada en BME Growth, el segmento dedicado a pymes de la Bolsa española. El CEO de ATLAS Energía, Néstor Gutiérrez, asistió ayer al tradicional acto de toque de campana y lanzamiento bursátil, junto al presidente de EV Motors, Rafael Ruiz, y al consejero delegado de Ebro, Pedro Calef.
En su estreno, la compañía se disparó en un 19,9%, hasta un precio de 8,25 euros por acción, frente a los 6,88 euros del precio de salida.
Con esta operación, la empresa aspira a reforzarse con el foco puesto en Zona Franca, donde prevé adaptar las líneas de montaje de la antigua Nissan, rebautizada como Ebro Factory y gestionada por Ebro y Chery.
La planta de la Zona Franca reanudará su actividad previsiblemente a finales de año con dos modelos de Ebro: el S700 y el S800, tres años después del cierre de la planta de Nissan.
La fabricación de los modelos S700 y S800 de Ebro en la planta implicará la incorporación de un primer centenar de trabajadores. Con la fabricación de nuevos modelos de Ebro y del Omoda 5 eléctrico de Chery, los fabricantes prevén que la planta vaya incorporando más operarios que forman parte de los 1.200 ex trabajadores de la antigua Nissan que optaron por reindustrializarse.