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El contador analógico de luz, cuyo plazo de sustitución por el nuevo contador digital terminó el 31 de diciembre de 2018, es un instrumento de medición del consumo eléctrico de un hogar o negocio. Los contadores analógicos miden el consumo de forma mecánica. Poseen unos discos metálicos numerados que van girando e indicando los kilovatios horas consumidos. Su funcionamiento y su diseño es mucho más básico que los modernos contadores digitales. Te contamos cómo leer el contador analógico.
¿Cómo leer el contador analógico de luz?
El funcionamiento de un contador de luz analógico es muy sencillo y leer el consumo eléctrico que hemos tenido es sumamente fácil. En el frontal del contador tenemos una numeración analógica que indica el consumo total en kilovatios hora desde el origen de su instalación. Para saber el consumo en un periodo determinado, tendremos que ir restando las anteriores lecturas del contador. Si, por ejemplo, el día treinta de abril indicaba un consumo de 125 000 kilovatios hora, y el 31 de mayo indica 125 700 kilovatios hora, la diferencia entre ambas lecturas será el consumo que hemos tenido durante el mes de mayo. En este caso, 700 kilovatios hora (125 700 – 125 000 = 700).
Comprar o alquilar el contador eléctrico
El contador eléctrico es imprescindible si queremos que la compañía suministradora nos permita tener luz eléctrica. Es el instrumento para que puedan medir nuestro consumo y facturarlo.
Pero el contador puede ser propiedad nuestra, si decidimos adquirirlo, o puede ser propiedad de la compañía, que nos lo cede en régimen de alquiler. Lo más común es tener el contador el alquiler: es lo que eligen la mayoría de los consumidores.
Cuando alquilamos el contador, la empresa suministradora nos cobrará una cantidad fija en la factura, que aparece bajo el epígrafe “alquiler de equipos de medida”. La compañía es la responsable del aparato, y en caso de avería o mal funcionamiento estará obligada a sustituirlo.
Si optamos por comprar el contador, la compañía nos facilitará el aparato, pero nosotros, como dueños del mismo, seremos los responsables del mantenimiento. Tendremos que hacer una inversión inicial mayor y tendremos que pasar las revisiones exigibles para demostrar que el contador funciona correctamente. En caso de avería, tendremos que asumir los gastos que conlleve la reparación o sustitución.
El precio de alquiler de un contador analógico es de 0,51 euros al mes. El alquiler de los nuevos contadores digitales es de 0,81 euros mes.
Precio de la instalación del contador
Si quieres saber cómo leer el contador analógico propiedad de la compañía porque optamos por alquilárselo a ella, solo tendremos que pagar los llamados derechos de alta de luz a la compañía suministradora. El alta de la luz está formado por tres conceptos diferentes, que varían según la potencia contratada:
- Derechos de enganche: 9,04€ + IVA.
- Derechos de acceso: 19,70€ /kW + IVA.
- Derechos de extensión: 17,97€/kW + IVA.
El kilovatio (kw) va referido a la potencia eléctrica total contratada: 2500 kilovatios, 3000 kilovatios, etc. El importe del alta del suministro eléctrico se abonará en la primera factura de la luz.
Si optamos por comprar el contador, tendremos que sumarle entre 90 y 200 euros según el modelo que elijamos, más el coste de un electricista autorizado que nos lo instale.
El fraude eléctrico no merece la pena
Hay muchas personas con la tentación de pagar menos por la luz que consumen y para ello no dudan en intentar trucar el contador de la luz. Hay profesionales sin escrúpulos que se prestan a ello y engañan diciendo que pueden conseguir paralizar el contador, para que no registre todo el consumo.
Normalmente, utilizan técnicas muy burdas y sin ningún tipo de garantía, que más pronto que tarde son detectadas por las compañías eléctricas. Este tipo de fraudes, además de que acarrean fuertes penalizaciones económicas por parte de la compañía suministradora, pueden ser constitutivas de un delito.
De todos modos, a las alturas en que estamos, nuestra recomendación es que te pases al contador digital.