Contratar una tarifa eléctrica que se ajuste a las necesidades de la empresa es de vital importancia para ganar competitividad y ahorrar costes. Por esta razón, es fundamental que tengas claras cuáles son tus necesidades antes de contactar con empresas especializadas que puedan responder.
No todas las empresas tienen las mismas necesidades. Mientras que algunas compañías realizan un uso homogéneo de la electricidad a lo largo de todo el día, otras centran su actividad en determinadas horas del día. Y mientras que algunas necesitan poca potencia, otras necesitan tener encendidas varias máquinas a la vez o hacer un uso intensivo, como es el caso de las grandes industrias.
Para las grandes industrias, la modalidad más económica es la Tarifa 6.1 A, sobre todo para aquellas que necesitan potencias superiores a los 450 kW. Esta tarifa se caracteriza por estar dividida en seis periodos, incluyendo discriminación horaria, pero que no tienen nada que ver con los periodos Punta, Llano y Valle como sucede en otras tarifas.
Así pues, el coste de la energía y de la potencia varía en función del tramo horario en el que se consuma. La tarifa 6.1A ofrece entre 1 kW y 30 kW de energía, con una potencia de 450 kW; y la tarifa 6.1B, de entre 30 kV y 36 kV de energía, con una potencia superior a 450 kW.
- Término de potencia activa:
se trata del margen que se lleva la comercializadora de luz por ofrecer el servicio y lo que cobra la regulación en concepto de peaje: tasa por el transporte de la electricidad y por las infraestructuras instaladas. Para cobrar este importe, se multiplica el consumo por el precio del kWh. En la factura se muestra el importe de cada periodo.
- Término de potencia:
en este apartado se muestra la potencia contratada por el cliente, que siempre es fija y que se paga en función de la cantidad de aparatos que se encuentran conectados a la red eléctrica. Parte de este precio es abonado a la regulación. Para saber la potencia que se ha usado realmente, la instalación debe contar con un maxímetro que permite detectar si se ha superar la potencia contratada o no. En este caso, puede verse el importe de la potencia de cada periodo.
- Energía reactiva:
se mide mediante kVArh (kilovoltamperio reactivo hora) y no es como la activa. Solamente es consumida por algunos frigoríficos y ascensores. En lo que respecta a los periodos, hay que decir que solamente se muestra el importe de 5 periodo y no de 6.
Pero este tipo de tarifa no solamente es recomendable por el ahorro de costes que supone, sino también porque las disposiciones legales de iluminación en las industrias son cada vez más estrictas en todo el mundo, y obviamente España no iba a ser una excepción. El objetivo es fomentar un mayor respeto al medio ambiente y a la salud de las personas, y mejorar la productividad de las industrias.