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La potencia eléctrica es la cantidad de kilovatios (kW) que puedes solicitar de forma simultánea a la red eléctrica de tu vivienda. Es muy importante que siempre tengamos contratada la potencia adecuada, ya que pasarse supone un gasto innecesario y quedarse corto significa no poder hacer tu vida.
Para que lo entiendas mejor; si tienes encendida al mismo tiempo, el horno, la lavadora y la calefacción, lo normal es que la potencia que vayas a necesitar sea de entre 4 kW y 6,9 kW. Por eso, si tienes menos de 4 kW, terminarás quedándote a oscuras hasta que apagues alguno de los aparatos.
A la hora de contratar una tarifa eléctrica, uno de los factores más importantes a tener en cuenta es la cantidad de electrodomésticos que usas habitualmente al mismo tiempo en casa, para ver cuánta potencia necesitas. Da lo mismo si tu vivienda es grande o pequeña, lo que realmente marca la diferencia a la hora de hablar de potencia es, por ejemplo, que tu calefacción o tu termo sean eléctricos.
Cuanta mayor potencia tengas, más aparatos eléctricos podrás conectar al mismo tiempo, pero también pagarás más al mes, ya que la factura se divide en consumo y en potencia. Por esta razón, una de las mejores formas de ahorrar en la factura de la luz es reducir una potencia innecesariamente alta. Alrededor de 60 euros menos al año por cada tramo que bajes.
No obstante, debes tener en cuenta que todo este ahorro no servirá de nada si luego te quedas corto. Y es que si la potencia contratada es demasiado baja, en cuanto enciendas varios electrodomésticos al mismo tiempo, te quedarás sin luz. Entonces, tendrías que solicitar una subida de la potencia, lo que te costaría dinero. En el mejor de los casos, tendrás que pagar unos 50 euros para volver a subir la potencia y en el peor unos 200 euros. Así pues, hay que calcular muy bien la potencia eléctrica que se necesita para que el cambio no termine saliendo caro.
¿Cómo calcular la potencia eléctrica que necesitas?
Para calcular la potencia eléctrica que necesitas en tu vivienda, únicamente necesitas conocer los metros cuadrados de la casa, el tipo de calefacción y sus electrodomésticos. Para que tengas una orientación, a continuación te damos los rangos aproximados de consumo que suele necesitar cada electrodoméstico:
- Calefacción: 1 – 2,5 kW
- Lavavajillas: 1,5 – 2,2 kW
- Lavadora: 1,5 – 2,2 kW
- Horno: 1,5 – 2,2 kW
- Cocina vitrocerámica: 0,9 – 2 kW
- Aire acondicionado: 0,9 – 2 kW
- Microondas: 0,9 – 1,5kW
- Calefacción bajo consumo: 0,4 – 0,8 kW
- Frigorífico: 0,25 – 0,35 kW
- Televisor: 0,15 – 0,4 kW
¿Cómo saber si tienes una potencia contratada demasiado alta?
Conecta todos los aparatos eléctricos de tu casa. Si el Interruptor de Control de Potencia (ICP) no salta, lo más probable es que tengas una potencia contratada demasiado alta. Lo que quiere decir que puedes reducir bastante la factura de la luz con sólo bajar la potencia.
En cualquier caso, si necesitas asesoramiento personalizado, puedes contactar con Atlas Energia, y estaremos encantados de resolver tus dudas.